El jueves pasado inauguramos ‘Café & Growth’, un espacio abierto a los más de 2.500 profesionales del sector digital de Product Hackers School en el que dar y encontrar apoyo.
Una hora mensual muy terapéutica para empatizar con los problemas que tenemos al frente de un proyecto. Con vista a crear sinergias entre perfiles y darnos acompañamiento durante la batalla.
Lo cierto que me llevé un gran sabor de boca y la sensación de que nos parecemos más de lo que pensamos.
Estos son los perfiles de algunos de los participantes:
Una persona que había perdido a todo su equipo de Inbound el mismo día por un abandono en bloque
Otra que estaba al frente del departamento digital de una empresa de construcción, con un modelo B2B enormemente complejo
Otra de ellas llevaba más de 20 años dando servicios de consultoría de marketing digital por su cuenta, buscando siempre los mejores resquicios para no tirar la toalla
Otra que se dedica a hacer Growth en una startup española en búsqueda de financiación
Y otra que está al frente de un eCommerce de productos para hacer magia, que a su vez vende cursos y gestiona una comunidad (casi nada)
A priori, ninguna de las 9 personas que estábamos en la sesión compartíamos nada. Sin embargo, la realidad es bien diferente. En el momento en el que empezó a fluir la conversación, me di cuenta de que estamos conectados.
Los problemas suelen ser los mismos, lo que cambia es el contexto y la situación particular de cada uno de nosotros.
🙄 Fuerzas opuestas que se parecen al Yin y al Yang
Salieron multitud de barreras con las que lidiamos diariamente.
Da igual que trabajes en una empresa de construcción, de magia o en una papelería. Una buena mentalidad te hace diferente al resto y te acerca a tus objetivos.
💆🏻♂️ La falta de encaje con la cultura de la empresa
Esto hace mella en cualquiera. No solo se trata de que un trabajador tenga las habilidades y la experiencia necesarias para un puesto, sino también de que comparta los valores y la visión de la compañía.
Los empleados que se sienten alineados con la cultura de la empresa suelen ser más felices y estar más satisfechos con su trabajo. Esto impacta directamente en la productividad. Porque son capaces de comunicarse y colaborar más eficazmente con sus compañeros de trabajo, y se produce un sentimiento de motivación y compromiso que es recíproco.
Esta productividad influye directamente en la retención de talento, uno de los mejores indicadores del éxito a más largo plazo. No, no está la cosa para permitir la fuga de talento con lo que cuesta encontrarlo.
De esto hablamos mañana en la newsletter de Product Hackers y te prometo que no es premeditado. Que conste que el tema estaba previsto antes de la sesión de ‘Café & Growth’.
🎯 La velocidad por conseguir los objetivos
Las personas que están al frente de una empresa suelen ser ambiciosos a la hora de establecer los objetivos de crecimiento.
Como todo, depende del tipo de empresa y su estado de consolidación.
En general, conseguir los objetivos de negocio lo antes posible reporta a la compañía ciertas ventajas competitivas, acelera el retorno de la inversión, motiva al equipo y genera más interés en el sector.
No obstante, la rapidez nunca debe sacrificar la calidad del producto o servicio y la sostenibilidad a largo plazo.
Ser un caso de éxito en sí mismo como ejemplo de empresa que crece a toda velocidad es muy goloso. Para qué nos vamos a engañar.
🤼♂️ Retar al status quo
El cambio suele generar enemistad con los stakeholders.
Esa resistencia al cambio de las altas esferas suele venir provocado por pensar en situaciones de inestabilidad, inversión en más recursos (tiempo, esfuerzo y dinero básicamente), el coste de oportunidad asociado al fracaso, las situaciones de conflicto que se puedan generar o la incapacidad de florecer en la incertidumbre.
Retar al status quo es fundamental para el crecimiento de cualquier compañía.
Por desgracia, fa fórmula de cómo minimizar los riesgos y maximizar las oportunidades de éxito no existe, ni se le espera.
💰 Los principios y la rentabilidad
¿Qué buscamos, ser éticos o conseguir resultados?
Este fue un bonito tema de discusión; en nuestras cabezas siempre tenemos una idea de cómo nos mostramos al mundo, cuáles son nuestros valores y hacia dónde se dirige nuestra visión. Esto hace que haya empresas con las que nos encantaría trabajar, empresas con las que no nos importaría y empresas con las que no.
Ahora bien, ¿hasta dónde podemos controlar? Si no tenemos un flujo de caja que nos permita la supervivencia de la empresa, no estaremos en condiciones de elegir en qué proyectos entramos y en qué proyectos no.
En las películas queda muy bien eso de no hacer nada que vaya contra tu voluntad, pero cuando hablamos de empresas y rentabilidad, la cosa cambia.
Para gustos, los colores. Hay quienes están dispuestos a facturar mucho menos con tal de promover una ética en su estrategia de ventas y hay quienes aprovechan esos proyectos con menos fit para consolidarse y crecer a un x2 o un x3.
😄 Un dato positivo
El viernes pude dedicar unas 3 horas de mi trabajo a cacharrear con la Inteligencia Artificial. Reconozco que me encanta que la empresa nos impulse a que lo hagamos.
Desde hace tiempo he estado indagando sobre la posibilidad de crear contenido para las redes sociales en base a cualquier otro contenido que haya en la web, propio o ajeno.
Utilizando Make y gracias a Francisco de Brito, fui capaz de automatizar la publicación de un hilo de tweets en base a un post publicado en el blog. De esta forma, se puede hacer un scraping de contenidos masivo. Solo necesitas establecer el tema sobre el que publicar y automatizarlo.
El proceso es el siguiente:
A partir de una url, Make hace una petición para encontrar esa página web.
A continuación, se le pide que de ahí, recoja el html que conforma la página.
El siguiente paso es extraer ese html, convertirlo en texto y limpiar la información para poder crear el prompt.
Se incluye un paso para ChatGPT 4 elabora un tweet en base a lo que hayamos incluido en el prompt
Se finaliza enlazando una cuenta de Twitter desde donde publicar el tweet creado por ChatGPT
Como habrás imaginado, es un proceso repicable a cualquier otra plataforma.
Con esto, estaríamos listos. ¿Qué te parece? Me encantaría que te atrevieras a probarlo tú mismo y me contaras qué tal te ha ido.